Vivimos en una era en la que la tecnología transforma la forma en que trabajamos, nos comunicamos y también cómo aprendemos.
Como sabéis, en Telemática siempre buscamos implementar las herramientas más innovadoras para ofrecer una experiencia educativa única y motivadora.
Una de nuestras apuestas más recientes, relacionada con nuestras actividades extraescolares, es el uso de mundos virtuales y la programación dentro de estos entornos.
A través de esta metodología, logramos que el aprendizaje de conceptos complejos, como la programación o la robótica, sea algo tangible y divertido para el alumnado. Además, la posibilidad de visualizar sus creaciones con gafas de realidad virtual (RV) abre un mundo de oportunidades para explorar nuevas formas de aprender.
La creación de mundos virtuales: un espacio de imaginación sin límites
Crear mundos virtuales es una actividad que potencia la creatividad, el trabajo en equipo y el pensamiento crítico. En nuestras clases, los/as estudiantes construyen sus propios escenarios virtuales, desde ciudades futuristas hasta ambientes naturales o laboratorios científicos. Esta actividad no solo es entretenida, sino que también los empodera, dándoles el control total sobre sus propios entornos de aprendizaje.
A través de diferentes plataformas digitales, aprendemos a diseñar estos mundos, a entender la lógica detrás de su creación, como la interactividad entre objetos o el desarrollo de misiones y juegos dentro del mundo que ellos mismos han generado. La mejor parte es que pueden ver sus creaciones en primera persona con gafas de RV, lo que convierte la teoría en una experiencia visual y práctica.
Programación aplicada a mundos virtuales: del código a la realidad
Una de las ventajas clave de integrar mundos virtuales en nuestras actividades es la posibilidad de combinar la programación con estos entornos interactivos. Adquirimos la habilidad de construir un mundo virtual y de programar acciones dentro de estos mundos. Utilizamos bloques de código para crear eventos y movimientos dentro de los escenarios, lo que hace que los conceptos de secuenciación, lógica y pensamiento computacional se vuelvan mucho más comprensibles y accesibles.
Pero no nos quedamos solo en lo virtual. La conexión entre estos mundos y la realidad se da cuando el alumnado aplica lo aprendido a robots físicos. Por ejemplo, la lógica que utilizan para mover un objeto dentro del mundo virtual es la misma que luego aplicarán para programar el movimiento de un robot en el aula. Este enfoque fomenta un aprendizaje profundo, donde no tenemos que memorizar los conceptos, sino que los experimentamos y aplicamos de manera práctica.
Metodología: una educación basada en la experimentación constante
En nuestras clases, adoptamos una metodología centrada en la experimentación y el aprendizaje por descubrimiento, entre otras. Creemos firmemente que la mejor manera de aprender es haciendo, y los mundos virtuales ofrecen un entorno perfecto para que los/as estudiantes prueben, se equivoquen y mejoren sus habilidades. Cada proyecto es único, y cada persona desarrolla su propio ritmo y estilo de aprendizaje, lo que favorece una mayor autonomía y confianza en sus capacidades.
Por otro lado, estas metodologías de enseñanza-aprendizaje les permiten experimentar con tecnologías que ya están presentes en nuestra sociedad y que seguirán creciendo, como la realidad virtual y la inteligencia artificial. Esto les proporciona conocimientos técnicos y los prepara para enfrentar los desafíos tecnológicos del futuro.
Beneficios para el alumnado
El uso de mundos virtuales en la educación extraescolar tiene un impacto directo en el desarrollo de habilidades clave para el futuro, como por ejemplo:
Creatividad: permite desarrollar su imaginación y aplicar sus ideas de una manera visual y tangible.
Pensamiento lógico: al programar eventos dentro de estos mundos, desarrollan su capacidad de resolver problemas y seguir procesos lógicos.
Trabajo en equipo: muchos de nuestros proyectos se realizan en cooperación, lo que fomenta la comunicación y la capacidad de trabajar en conjunto para lograr un objetivo común.
Adaptación a nuevas tecnologías: las experiencias con RV y la programación los familiarizan con las tecnologías emergentes, preparándose para un mundo laboral donde estas herramientas son cada vez más importantes.
Como en todos los ámbitos, nuestro equipo está comprometido con la constante innovación educativa. El uso de mundos virtuales y la programación dentro de estos entornos no solo transforma la forma en que los estudiantes aprenden, sino que también les prepara para un futuro en el que la tecnología será parte integral de sus vidas. Este enfoque educativo, que combina lo visual, lo práctico y lo lúdico, permite que adquieran conocimientos, que los vivan, fomentando así su curiosidad y su deseo de seguir aprendiendo.